ADVERTENCIA: Los hechos y/o personajes descriptos a continuación, son creaciones de la autora y pertenecen al mundo de la ficción. Cualquier parecido con la realidad, es pura coincidencia.
Un día cualquiera de la semana, hogar de familia tipo. Hora, cerca de las diez de la noche. Los chicos, bañados y "empiyamados" juegan y hacen bastante lío en la habitación. El esposo está sentado en el sillón viendo tele. La mujer acaba de terminar de bañarse. El baño es un enchastre y la cocina ídem. Él la invita a sentarse con él "dale, che. Yo después lavo" y la mujer piensa para sí "tardo menos en lavar los platos yo ahora, que mañana por la mañana, cuando vos te olvides de hacerlo". Entonces contesta: "Termino y voy". Mientras friega platos, vasos y cacerolas, vienen los chicos corriendo y se meten en el baño, obviamente, todavía mojado y desordenado. Descalzos, como de costumbre, se mojan por completo las medias que les acababa de poner su madre. La mujer, chorreando detergente, se acerca al baño y los manda a su habitación nuevamente. Los pibes se cambian las medias y las dejan en la ya enorme pila de ropa para lavar que todavía yace en el baño, inherte hasta que nuestra protagonista termine de limpiar la cocina y se disponga a llevarla al lavadero. En la cara del esposo asoma una "cara de ort incipiente", dado que pasaron 20 minutos desde su aterior covite y él se siente más solo que kung-fu... pobre (y con la cola atornillada al sillón). Una vez más, los chicos se acercan a la cocina y piden "ma, quiero manzana, me pelás". So, la madre, deja de lavar y les pela y corta la manzanita a los chicos. Listo, termina la cocina y se dispone a sacar la pila de ropa del baño, cuando aparece el nene de dos años, que le dice "caca". Deja la pila de ropa en el piso una vez más, para limpiarlo y deshacerse de la "bomba molotov" o pañal. Y piensa, una vez más para sus adentros "no vendría mal algo de ayuda, eh". El nene ya está limpio, así que lo manda a jugar con su hermano y se apresta a terminar -de una vez por todas- con el bendito baño. La cara de su esposo, ya está en un 60 por ciento de "ortez", así que se apura porque piensa "si tengo que usar el baño de madrugada y está mojado, entre que camino como un zombie, termino de matarme si me resbalo". Por fin, la mujer guarda todos los utensilios de limpieza, lava sus manos, y se acerca al living masajeándolas con crema nutritiva. La cara de su esposo ya es "cien por ciento ort". Ella atina a sentarse junto a él, dispuesta a mimarlo un poco para comepnsarlo un poco y tratar de pasar un buen momento. Pero él no la deja, y dice "me pudrí de esperarte, me voy a dormir". Nuestra heroína (a esta altura del relato, creo que se merece este mote) no sabe si llorar de broca o mandarlo a "plumas verdes" (la de la lora, vieron?). En eso, irrumpen los chicos, llorando a coro, porque acaban de golpearse jugando y ya no dan más de cansancio. La madre los lleva al baño, les moja las partes golpeadas, hace que se laven los dientes y los acompaña a la habitación. Les lee un cuento para que bajen las revoluciones y se queda con ellos hasta que se duarmen. Luego, se va de puntitas a su habitación dispuesta a descansar un poco y ver algo de tele antes de dormir, bastante molesta por la sitación anterior. Se acuesta con un "tecito" en mano, mientras siente los brazos de su marido que la "buscan". Una vez más, piensa para sí "encima querés ESO. Querés que tenga humor y ganas después de lo que pasó. Nah..." Él, con vos de dormido -y de enojado- le dice que vos siempre igual, que las cosas se hacen sólo cuando vos querés. Ella lo mira de reojo, sin ganas de confontarlo y de gastar saliva. Sutilmente, evade el "ataque" yéndose al baño a hacerse todos los procesos de belleza previos a dormir. Cuando vuelve a la cama, "el oso ya se encuentra invernando".
EPÍLOGO
Este relato, hecho completamente desde una mirada femenina, intenta barrer con el mito de "la mujer se covierte en madre y pierde la líbido". Say no more!
Un día cualquiera de la semana, hogar de familia tipo. Hora, cerca de las diez de la noche. Los chicos, bañados y "empiyamados" juegan y hacen bastante lío en la habitación. El esposo está sentado en el sillón viendo tele. La mujer acaba de terminar de bañarse. El baño es un enchastre y la cocina ídem. Él la invita a sentarse con él "dale, che. Yo después lavo" y la mujer piensa para sí "tardo menos en lavar los platos yo ahora, que mañana por la mañana, cuando vos te olvides de hacerlo". Entonces contesta: "Termino y voy". Mientras friega platos, vasos y cacerolas, vienen los chicos corriendo y se meten en el baño, obviamente, todavía mojado y desordenado. Descalzos, como de costumbre, se mojan por completo las medias que les acababa de poner su madre. La mujer, chorreando detergente, se acerca al baño y los manda a su habitación nuevamente. Los pibes se cambian las medias y las dejan en la ya enorme pila de ropa para lavar que todavía yace en el baño, inherte hasta que nuestra protagonista termine de limpiar la cocina y se disponga a llevarla al lavadero. En la cara del esposo asoma una "cara de ort incipiente", dado que pasaron 20 minutos desde su aterior covite y él se siente más solo que kung-fu... pobre (y con la cola atornillada al sillón). Una vez más, los chicos se acercan a la cocina y piden "ma, quiero manzana, me pelás". So, la madre, deja de lavar y les pela y corta la manzanita a los chicos. Listo, termina la cocina y se dispone a sacar la pila de ropa del baño, cuando aparece el nene de dos años, que le dice "caca". Deja la pila de ropa en el piso una vez más, para limpiarlo y deshacerse de la "bomba molotov" o pañal. Y piensa, una vez más para sus adentros "no vendría mal algo de ayuda, eh". El nene ya está limpio, así que lo manda a jugar con su hermano y se apresta a terminar -de una vez por todas- con el bendito baño. La cara de su esposo, ya está en un 60 por ciento de "ortez", así que se apura porque piensa "si tengo que usar el baño de madrugada y está mojado, entre que camino como un zombie, termino de matarme si me resbalo". Por fin, la mujer guarda todos los utensilios de limpieza, lava sus manos, y se acerca al living masajeándolas con crema nutritiva. La cara de su esposo ya es "cien por ciento ort". Ella atina a sentarse junto a él, dispuesta a mimarlo un poco para comepnsarlo un poco y tratar de pasar un buen momento. Pero él no la deja, y dice "me pudrí de esperarte, me voy a dormir". Nuestra heroína (a esta altura del relato, creo que se merece este mote) no sabe si llorar de broca o mandarlo a "plumas verdes" (la de la lora, vieron?). En eso, irrumpen los chicos, llorando a coro, porque acaban de golpearse jugando y ya no dan más de cansancio. La madre los lleva al baño, les moja las partes golpeadas, hace que se laven los dientes y los acompaña a la habitación. Les lee un cuento para que bajen las revoluciones y se queda con ellos hasta que se duarmen. Luego, se va de puntitas a su habitación dispuesta a descansar un poco y ver algo de tele antes de dormir, bastante molesta por la sitación anterior. Se acuesta con un "tecito" en mano, mientras siente los brazos de su marido que la "buscan". Una vez más, piensa para sí "encima querés ESO. Querés que tenga humor y ganas después de lo que pasó. Nah..." Él, con vos de dormido -y de enojado- le dice que vos siempre igual, que las cosas se hacen sólo cuando vos querés. Ella lo mira de reojo, sin ganas de confontarlo y de gastar saliva. Sutilmente, evade el "ataque" yéndose al baño a hacerse todos los procesos de belleza previos a dormir. Cuando vuelve a la cama, "el oso ya se encuentra invernando".
EPÍLOGO
Este relato, hecho completamente desde una mirada femenina, intenta barrer con el mito de "la mujer se covierte en madre y pierde la líbido". Say no more!
Me parece que te esta faltando dialogo con tu marido, porque ser madre es un trabajo igual que el de todos,lo del dialogo te digo por que la pareja es de a dos mientras uno lava los platos el otro hace dormir a los niños , asi se desocupan los dos al mismo tiempo y tienen tiempo de estar juntos.Como no te conozco nose como es tu relacion pero te digo esto por lo que publicas, si tenes ganas podes responder.
ResponderEliminarPreguntas:¿hace mucho que estan juntos? hace mucho que estan casados? ¿fui tu primer y unico novio y marido? ¿estuviste de novia antes, con otra persona? Si fue asi. ¿como te fue? ¿mucho tiempo? ¿lo dejaste o te dejo? Tuve que crear un blog para poder comentar jejje, asique espero tu respuesta.
Hola Flor! abro cada tanto el blog pero todavia no respondiste.....
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