Recién
arrancamos noviembre y los comercios ya se poblaron de productos navideños. Ni
mencionemos el tema de los precios, ¿no? Dicen que planificando, todo
sale mejor: gastamos lo justo y necesario y, además, nos salen las cosas bien.
Así que de acá en adelante les propongo algunos posts con consejos y propuestas
al respecto.
No
estaría nada mal armarse una lista con las posibles comidas, picadas y
productos que nos gustaría consumir e ir "almacenando",
"acopiando", para despejar un poco el bolsillo del último mes del
año.
Y, ya
que estamos, por qué no animarnos a probar con algún producto original, para
sorprender y sorprendernos. La marca nacional Marlom’s Popcorn propone
un Popcorn Bar...
Con frascos, cajitas y latas para contener los pochoclos, que podemos
preparar nosotras mismas (o con ayuda de los más chicos o de un/a amigo/a) y
decorar con motivos alusivos. En dichos contenedores, colocamos la variedad
salada, a la que saborizamos con albahaca, perejil y aceite de oliva.
También podemos hacer otra con manteca con parmesano y pimienta. 
La
otra opción es para el momento dulce, donde podemos armar un Candy Bar Pochoclero entre el turrón y la garrapiñada.
Para la decoración debemos utilizar distintos elementos que nos permitan romper
la monotonía visual, como por ejemplo fuentes, soportes para tortas y/o
cupcakes, bandejas, frascos, pedestales, palabras en madera, etc. Podemos
hacer cupcakes de cualquier sabor y ¡pega los pochoclos encima con dulce
de leche!
También
están los conitos con pochoclos coloridos, que se colocando agua en una olla al
fuego mínimo, se le agrega azúcar para formar un almíbar ligero. Después,
agregamos el colorante (del color que quieras) hasta disolver y lograr un
almíbar espeso. Sacar del fuego y volcar los pochoclos. Revolver hasta
que se tiñan todos.
Colocar
los pochoclos de color en conitos para decorar la mesa.
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