Mejillas enrojecidas, piel tirante, labios secos, manos ajadas. Son algunas de las consecuencias de las bajas temperaturas en nuestra piel, expuesta sobre todo a cambios bruscos entre el frío y el calor. Para evitarlos -previa consulta al Dermatólogo- podemos tener a mano una serie de productos:
-Una buena crema corporal: para usar después del baño, cuanto más "pesadita", mejor (si es que tu piel es apta). Fundamental para evitar descamaciones, sobre todo en las piernas, codos y rodillas, que suelen ser los puntos más críticos. Como siempre digo, hasta la crema más económica es mejor que no usar nada.
-Barra o pomo de manteca de cacao: en la cartera de la dama, infaltable para esos días ventosos donde los labios sufren. Aunque uses makeup, usalo antes del color para humectar, de ser necesario. Atenti, que hay labiales con componentes nutritivos también.
-Productos faciales, de día y de noche: dando por hecho que son "buenas alumnas" y que se limpian la piel dos veces por día, paso directamente a la recomendación en cuanto al "tratamiento" :). ¿Cómo contrarrestamos la agresión del frío en nuestra piel? Utilizando productos pensados para pieles sensibles, con agentes descongestivos, como lo es la manzanilla. Después de limpiarte, hidratá con alguna crema de día. Podés reforzar pulverizando el rostro con agua termal. Y de noche, lo mejor son los serums, formulados con productos concentrados que actúan mientras dormimos. Para que tengan en cuenta, Gigot presenta una línea especialmente formulada con manzanilla, compuesta por una crema de día que fortalece la piel y evita irritaciones; un serum de acción prolongada, de textura ligera y refrescante. Y el agua termal pensada para después de depilarte, desmaquillarte, hacer deporte o como refuerzo de un día largo.
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